Entrevista al director del grupo sobre Necesidades Educativas Especiales

Antonio Sánchez ha publicado este año el informe de investigación la "Integración Educativa y Social de los estudiantes con discapacidad en la Universidad de Almería".

¿Qué otros informes o estudios ha realizado el Grupo de Investigación HUM 782 “Diversidad, Discapacidad y Necesidades Educativas Especiales?

Aunque se trata de un grupo joven hemos desarrollado distintos e interesantes trabajos de investigación, de entre ellos cabe citar dos proyectos en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid y con la UNED (Universidad Nacional de Educación a Distancia), como un análisis del Servicio de Apoyo Tecnológico y Didáctico para mejorar la Accesibilidad de la Enseñanza Universitaria para Personas con Discapacidad.

Nuestras líneas de investigación son:

Formación inicial y permanente del profesorado
Educación y discapacidad
Necesidades educativas especiales
Programas de refuerzo y transición ante situaciones educativas de discapacidad
Educación y diversidad sociocultural
¿Cómo surgió la iniciativa para realizar este estudio?¿y de quién?

Desde octubre de 2003 me asignaron responsabilidades en el equipo de gobierno de la Universidad de Almería, nombrándome Director del recién creado Secretariado de Asuntos Sociales, en el que puse en marcha tres líneas de trabajo:

Unidad de Apoyo al Estudiante con Discapacidad
Unidad de Apoyo al Voluntariado y Solidaridad
Unidad de Apoyo al Asociacionismo y Participación
Desde mis responsabilidades creí necesario un trabajo de investigación que pudiera proporcionar datos reales que nos permitieran diagnosticar la situación de partida. Razón por la que puse en marcha un interesante trabajo de investigación del que me ocupé no sólo de la coordinación sino de ser parte muy activa en todo el proceso, y en el que nos planteamos como objetivo general el estudio sobre la integración educativa y social de los estudiantes con necesidades especiales asociadas a una discapacidad, desde las perspectivas del personal docente e investigador, del personal de administración y servicios, de los estudiantes en general y de los estudiantes con discapacidad, en la Universidad de Almería.

¿Cree que en general los estudiantes con discapacidad gozan de universidades accesibles?

El esfuerzo que se está produciendo en el contexto europeo hacia políticas más sociales tiene repercusiones en nuestro país a partir de los años ochenta, comenzando con el cambio llevado a cabo en todo el sistema educativo y concretamente con la promulgación y el posterior desarrollo normativo del Plan Nacional para la Educación Especial, 1978, entre otras normativas.

Del mismo modo hay que hacer notar que se han producido significativos avances en la Comunidad Autónoma de Andalucía, que desde el aspecto normativo se concretan en: Ley de Atención a las Personas con Discapacidad, Ley de Solidaridad en la Educación, Decreto sobre Atención al Alumnado con Necesidades Educativas Especiales, Orden de Evaluación Psicopedagógica, Orden sobre Proyectos Curriculares en Centros Específicos de Educación Especial, Orden sobre Programas Transición Vida Adulta y Laboral y finalmente la Ley 17/2007, de 10 de diciembre, de Educación en Andalucía.

Los cambios desarrollados en el ámbito de la enseñanza no universitaria pronto la transciende llegando a la universidad, ya que al alumnado con discapacidad se le brinda la posibilidad de desarrollarse en contextos más favorecedores del aprendizaje, por lo que la institución universitaria tiene ante si un nuevo reto que abordar, para el que debe adoptar los mismos principios que en su momento asumieron otros niveles del sistema educativo, esto es, el principio de normalización (referido al entorno socioeducativo), el principio de integración (aceptando la diversidad y la igualdad de oportunidades) y el principio de individualización (atendiendo a las necesidades específicas, -especificidad-).

¿Cuál es la demanda más urgente por parte de los estudiantes con discapacidad?

Como muestra nuestra investigación, que además es coincidente con otros estudios a nivel europeo y nacional, podríamos indicar que existe acuerdo general con la idea de favorecer la mejora de la atención hacia los estudiantes con discapacidad, para lo que es necesario que la universidad firme convenios de colaboración con asociaciones e instituciones públicas y/o privadas. Incluso consideran que en la universidad debe existir una unidad central que coordine y asesore a estudiantes con discapacidad, al profesorado y al personal de administración y servicios.

La demanda más urgente es la igualdad de oportunidades en la universidad.

¿Han contado con entrevistas a alumnos con discapacidad reales para realizar el estudio? ¿cuántos?

En relación a la población integrada por los estudiantes con necesidades educativas especiales asociadas a una discapacidad, de un total de 138 matriculados (65 hombres y 73 mujeres), los datos resultantes son los que a continuación se muestran en relación al tipo discapacidad, destacando la física con un 46,38% seguida de otras.

¿Cómo definiría la educación inclusiva?

Podríamos dar un paso más e intentar la respuesta a una cuestión clave, ¿qué hacer para conseguir una escuela/educación inclusiva?, porque es cierto que la inclusión no crea los problemas, pero los deja al descubierto. Es evidente que los alumnos que fuerzan los límites del sistema son los que permiten observar la cruda realidad, la estrechez y las restricciones de la escuela, revelan la forma en la que nuestro sistema educativo debe crecer y mejorar para que se satisfagan las necesidades de todo el alumnado. Es necesario un replanteamiento del currículum, tendremos que cambiar la forma de enseñar, nuestras prácticas y métodos de enseñanza, explorando estilos más interactivos y comprometidos.